Psicológicamente nuestro cuerpo está preparado para enfrentarse a situaciones
conflictivas que pueden producir modificaciones emocionales en forma de
ansiedad, estrés, miedo, rabia, tristeza o frustración y que se acompañan de
cambios fisiológicos (tensión muscular, vaciado estomacal,...).
El aprendizaje permite desarrollar las
defensas y el moldeamiento de una personalidad más preparada para enfrentarse y
superar exitosamente a las diferentes situaciones de emergencia. Este
aprendizaje se puede llevar a cabo desde diferentes fuentes:
·
Un aprendizaje en el ámbito familiar y de la comunidad a la que se
pertenece, convirtiéndote en un adulto independiente y seguro. Las relaciones
interpersonales te pueden proporcionar seguridad y confianza en ti mismo y en
los demás.
·
También se puede producir un aprendizaje por experimentación. Por
medio de estudios y de simulacros de situaciones adversas, como pueden ser los
simulacros de incendios que seguro que has realizado en el colegio o las
diferentes prácticas que vas ha realizar durante el desarrollo de este ciclo
formativo.
Si una situación agresiva
psicológicamente, o el cúmulo de varias de estas aunque no sean tan agresivas
(o sea, agresiones repetitivas que se van acumulando y debilitando las defensas
hasta que se llega a un punto en el que se rompe el equilibrio), supera
las capacidades de adaptación, generadas por los diferentes aprendizajes y por
los mecanismos de defensa, entonces, hablaremos de eventos traumáticos que
pueden generar una crisis. Aparecen reacciones más o menos duraderas, con respuestas
fisiológicas y psicológicas que ya no tienen una función protectora, sino que
conducen a alteraciones emocionales de gravedad variable y, en algunos casos, a
verdaderas enfermedades mentales.
Factores que influyen en el impacto
psicosocial
Naturaleza del
Acontecimiento
Situaciones
Inesperadas /Situaciones traumáticas duraderas / Estrés. Individual o
colectivo.
Personalidad de la
Víctima
El entorno y las
circunstancias
El impacto psicosocial que puede sufrir
una persona ante un acontecimiento estresante que supere su capacidad de
adaptación al medio, dependerá de los varios factores. De hecho, ante dos
emergencias sanitarias que a ti te pueden parecer muy similares pueden tener
consecuencias psicológicas para los afectados muy diferentes, y por tanto,
también comportamientos dispares. Por ejemplo, imagina un accidente de tráfico
con heridos con hemorragias leves. No es lo mismo que este sea en la ciudad
donde la asistencia sanitaria llegara en un espacio de tiempo breve, que un
accidente en la montaña donde esta asistencia se puede demorar y por tanto las
personas afectadas pueden estar en un estado de estrés mayor cuando tu llegues
al lugar de los hechos. Además, también influirán otros factores como la
personalidad de cada uno o los conocimientos individuales, ya que si eres capaz
de evaluar
correctamente una herida leve, está no
te supondrá un gran estrés.
Todos estos factores se pueden agrupar
en estos tres:
1. La naturaleza del acontecimiento.
Normalmente, producen un mayor impacto los eventos inesperados, los que pueden
afectar de una manera colectiva (no sólo a ti, sino a todo un grupo) y los que
implican una situación de estrés prolongada.
·
En situaciones inesperadas, como puede ser un terremoto, no da
tiempo a organizar estrategias de prevenciones individuales o colectivas y,
pueden generar sentimientos de impotencia. Además, las emociones pueden ser tan
fuertes que bloqueen las funciones defensivas que pudieran ser eficaces. Así,
las reacciones más frecuentes son el pánico paralizante o de huida e
incapacidad de reflexionar y tomar decisiones acertadas.
·
Ante un estrés individual, la víctima puede contar con el apoyo de
quienes le rodean y de la estructura social que le asiste (como puedes ser tú
como técnico de emergencias sanitarias). Sin embargo, cuando la emergencia es
colectiva, el impacto puede ser mayor, pues esa víctima a parte del drama
personal, hay que sumarle el drama que también están sufriendo su red familiar.
Además tu actuación como técnico también se verá mermada al tener un mayor
volumen de trabajo. En estos casos, es frecuente la desorganización en el aprovechamiento
de las fuentes de apoyo externo.
Así, después de ver como influye la
naturaleza del acontecimiento, veremos a continuación como influye la personalidad
de las víctimas y el entorno que rodee a la emergencia sanitaria:
2. Las características de la
personalidad y la vulnerabilidad individual de las víctimas. Dependiendo de tu
personalidad, tendrás una capacidad u otra para afrontar la emergencia. Así,
los niños y los adolescentes que todavía no tienen totalmente conformada su
personalidad, serán los grupos más vulnerables, ya que no han construido las
defensas suficientes para afrontar la adversidad.
·
Los ancianos, que frecuente mente pueden padecer afecciones
físicas o emocionales, pueden desarrollar sentimientos de dependencia y
sentimientos de minusvalía, lo cual contribuye a disminuir las capacidades de
adaptación y defensa.
·
Las madres, también son un grupo vulnerable, pues ante una
emergencia, suelen soportar una mayor responsabilidad en el cuidado de la
familia.
3. Entorno y circunstancias. Una
situación de emergencia, siendo la misma, será diferente según el entrono en
que se dé. No el lo mismo que una ciudad, donde los recursos y acceso a los
servicios sociales están muy a mano, que en un pueblo alejado o que en mitad
del campo.
·
Además, también hay que recordar que en las zonas pobres siempre
afectará más, ya no solo por la accesibilidad a los recursos, sino también por
la infraestructura en general; por ejemplo, un terremoto en Madrid no va a
afectar igual a una zona rica donde todos los edificios son de ladrillos y
poseen unos buenos cimientos, que en cualquier otra zona donde los edificios
sean simples chabolas.
Recuerda siempre que no existen dos
personas iguales ni dos situaciones iguales, por lo tanto, cada una de las
emergencias a las que te puedas enfrentar, será única y particular.
Reacciones psicológicas ante situaciones
de emergencia
En el apartado anterior hemos estudiado
que la reacción psicológica de un individuo ante una emergencia sanitaria puede
variar dependiendo de diferentes factores. En este apartado vamos a ver como
esas respuestas psicológicas varían también a lo largo del tiempo y por tanto,
también deben de variar las intervenciones que realicemos nosotros. Así, estas
variaciones de las respuestas de los afectados, se pueden dividir en cuatro
etapas:
1.
La que encuadra las primeras 72 horas tras el suceso estresante.
2.
La que abarca desde esas 72 horas hasta el primer mes.
3.
La tercera etapa que duraría hasta 2 ó 3 meses después.
4.
Y la última fase que se encuadraría a partir de estos 3 meses
Está claro que nuestra actuación se va
a referir solamente a la primera etapa, ya que el resto de actuaciones las ha
de realizar un especialista. Sin embargo, no has de subestimar la atención
psicológica en esta primera fase, ya que una buena actuación por tu parte puede
prevenir o paliar posibles afecciones psicológicas más tardías.
Así, vamos a ver las respuestas psicológicas que pueden aparecer en cada una de estas etapas y las intervenciones que se deberían adoptar.
En este punto continuamos con las
reacciones psicológicas de los afectados por una emergencia sanitaria y las intervenciones
que debemos de realizar. A continuación se exponen la tercera fase. que
corresponde desde el mes a los 2-3 meses después de la emergencia, y la cuarta
fase que correspondería a partir del tercer mes:
Primera ayuda psicológica
·
Objetivos y actitudes deseables
·
Principios básicos para la actuación en situaciones de emergencias
·
¿Qué debemos evitar en una emergencia sanitaria?
·
La seguridad en la primera ayuda psicológica
Objetivos y actitudes deseables en la
primera ayuda psicológica.
Nuestro importante y único objetivo
psicológico general en esta primera ayuda que vamos a realizar sobre los
pacientes, será el de ayudar de forma inmediata a dichas personas a mitigar el
impacto emocional que le pueda producir la situación estresante a la que esté
sometida. Sin embargo, este objetivo genérico lo podemos desglosar en varios
objetivos más específicos:
·
Satisfacer, en la medida de nuestras posibilidades, las
necesidades básicas y de supervivencia del individuo.
·
Reducir la tensión y la aflicción del paciente.
·
Contribuir a la toma de decisiones de los pacientes para resolver
los problemas urgentes causados por la emergencia sanitaria.
·
Favorecer el desarrollo de la ayuda mutua entre todos los
afectados.
·
Preservar una zona de seguridad interpersonal para las víctimas.
Facilitar el descanso de los pacientes.
·
Facilitar el contacto con familiares y amigos.
·
Ayudar a las víctimas en la localización y verificación del estado
de sus seres queridos.
Para conseguir los objetivos
anteriormente descritos debes desarrollar ciertas actitudes que te permitirán
ganar la confianza de los pacientes y establecer los lazos psicológicos
necesarios para una buena primera atención psicológica. Estas actitudes serán:
·
Las personas no esperan que el personal sanitario se sume a su
crisis, sino que la ayude a superarla Así, se requiere una actitud firme a la
par que serena, respetuosa y afectiva.
·
Evita ser crítico con los pacientes. Ya hemos visto en diferentes
unidades de trabajo que su percepción puede estar alterada y que los niveles de
estrés a los que son sometidos durante una emergencia sanitaria puede ocasionar
alteraciones cognitivas y de comportamiento, con lo cual evita sermonearles o
juzgarles.
·
Así, tampoco intentes calmar a la persona afectada convenciéndola
de está equivocada en sus apreciaciones o juicios.
·
Procura presentar una actitud de escucha responsable permitiendo
que la persona afectada se exprese hablando o llorando.
·
Mantén una actitud que facilite la empatía y lograrás así la
aceptación del paciente.
·
Hemos visto que la negación de los acontecimientos constituye un
mecanismo de defensa de la personalidad, lo cual es fundamental durante la fase
aguda. Así no intentes modificar dichas conductas defensivas.
·
Debes autocontrolarte, si tú no controlas tu propio
comportamiento, ¿cómo vas a controlar el de personas que necesitan de tu ayuda?
·
Has de tener una buena disposición para trabajar en equipo. Si
existe una emergencia sanitaria en la que están implicadas muchas personas, es
fundamental una buena organización y cooperación entre todos los que presten su
ayuda.
Principios básicos para la actuación en
situaciones de emergencias
Ahora que ya conoces los factores que
influyen en las reacciones psicológicas de las víctimas de una situación de
emergencia y los objetivos que has de buscar en tu intervención, vamos a ver
unos principios básicos que deberías seguir durante tus actuaciones. Sin
embargo, recuerda que cada situación y persona es única y por tanto has de
adaptarte a estas y puede que un determinado momento debas obviar estos
principios básicos. Por ejemplo, ya estudiarás que una de las premisas para la
actuación en una situación de intento autolítico por precipitación, es que
nunca debes intentar agarrar o sujetar al suicida, pero obviamente, si tu
valoración de la situación te hace pensar objetivamente que esta persona va a
saltar, deberás actuar según tu criterio particular en ese momento y obviar las
recomendaciones.
Así pues, los principios básicos para
la actuación en situaciones de emergencias serían:
·
Las necesidades básicas y de supervivencia como puede ser el agua
potable, el abrigo, el alojamiento,.. está directamente relacionada con la
primera ayuda emocional que necesitan los pacientes de una emergencia
sanitaria. Así, por ejemplo, en el derrumbe de un edificio, el cubrir a un
paciente con una manta o asegurarle que esa noche va a tener un techo bajo el
que dormir, le supondrá a esta la eliminación de cierto nivel de estrés.
·
Debes valorar cuidadosamente las reacciones y comportamiento de
las personas afectadas por una emergencia sanitaria para identificar a las que
requieran una atención psicológica más urgente y ofrecerles tu apoyo.
·
Asegúrate de que la primera ayuda psicológica no interfiere ni
complica los primeros auxilios médicos.
·
Si observas a alguien inmóvil y no existe ninguna razón física que
lo justifique, debes intentar eliminar esta inactividad, procura hablarle,
sentarla en un lugar seguro y asegúrate de que esté abrigada.
·
Elimina la posibilidad del pánico colectivo. Si existe alguien que
ya ha entrado en estado de pánico procura apartarla de las demás personas
presentes, ya que esa emoción es de fácil contagio; así, debes evitar que
corra, abrazándolo fuertemente si es necesario. A esta persona debes de
tratarla con firmeza, aunque siempre con respeto y sin gritar. No dejes sola a
esta persona y procura traer sus pensamientos a asuntos cotidianos.
·
La persona que está en estado de choque o conmoción debe ser
alejada del ambiente traumático. Procura enterarte de cual es su nombre y
llámala por este; debes hacer que se sienta acompañada, para ello háblale con
tono sereno y afectuoso, sosténle la mano, acaríciale o abrázale.
·
Si observas a una persona con un comportamiento agresivo debido a
sentimiento de dolor o de frustración, acompáñala calmadamente sin tratar de
detenerla inmediatamente (ya vimos que este es otro mecanismo de defensa de la
personalidad: Desplazamiento o sustitución), a menos que su seguridad o la de
otros corra peligro.
·
Ante una persona confusa debido a la emergencia, comunícale
claramente que estáis ahí para resolver sus problemas.
·
No trates de minimizar lo sucedido, pero evita comentar los
detalles más escabrosos.
·
Potencia en la medida de lo posible que las personas afectadas por
la emergencia se incorporen a tareas de ayuda mutua entre sí. Por ejemplo,
puedes hacer que un afectado busque entre el alboroto que se puede generar en
una emergencia, a los familiares de un niño al que el equipo sanitario está
atendiendo.
·
También puedes encargar a otro afectado que reparta mantas.
·
Este punto es una continuación del apartado anterior, y prosigue
con la enumeración de los principios básicos que debes tener en cuenta a la
hora de actuar ante una emergencia sanitaria:
·
Recuerda que según Maslow el segundo peldaño de la pirámide de las
necesidades humanas es el de seguridad. El contacto físico provoca una
sensación inmediata de seguridad, así, mientras que hablas con un afectado
puede cogerle la mano o poner esta sobre su hombro. No obstante, debes tener en
cuenta que hay personas o culturas a las que puede resultarles incómodo este
contacto.
·
La calma es casi tan contagiosa como el nerviosismo. Si tú actúas
con calma esto tendrá un efecto tranquilizador sobre las personas afectadas.
Procura hablar sosegadamente y en tono normal.
·
La soledad crea sentimientos opresivos. Evita dejar a la persona
afectada sola y procura permanecer junta ella el tiempo necesario, si has de
desplazarte a otro punto por que se requiera tu presencia, asegúrate de que
alguien se queda con ella.
·
Facilita que la persona afectada se desahogue. El llanto puede
aliviar los sentimiento, así, debes proteger la intimidad de la persona que
desee llorar.
·
Las personas se pueden sentir incómodos al expresar sus
sentimientos ante extraños, así que, evita los curiosos. El llevar a la persona
afectada y llevarla a un lugar con cierta privacidad puede ser la solución.
·
Si la víctima demanda información sobre su situación personal
debes explicar lo que estás haciendo evitando palabras técnicas, para que lo
entienda claramente, y, sin un alto contenido emocional. Puedes utilizar
expresiones como:
1.
"Esto duele un poco, o esto no duele".
2.
"Te vamos a entablillar la pierna".
3.
"Si te ponemos esto, estarás más cómodo".
4.
"Vamos a subirte a la ambulancia".
·
Es muy típico que una víctima te solicite información sobre otras
personas que puedan haberse visto afectadas por la emergencia sanitaria. Si
tienes la certeza de que la situación no es muy grave, adopta una actitud
tranquilizadora. Puede usar frases como:
1.
"En cuanto sepamos algo, ya se lo diremos".
2.
"Está siendo atendido".
3.
"Mis compañeros están con ellos".
·
Si ante la solicitud de información existen signos claros de
fallecimiento (por ejemplo, personas cubiertas con mantas) y la víctima tiene
acceso visual a la situación, ofrece una información objetiva.
·
Evita comentarios como "Puedo imaginarme por lo que has
pasado". Es preferible usar otras del tipo "Debe haber sido
terrible" o "Debe ser muy duro para usted", ya que no debes
ponerte de ejemplo o intentar explicarles que sabes por lo que están pasando
ellos. También evita expresiones que puedan alterar a los afectados por la
emergencia como puede ser: "hay que apresurarse en llegar al
hospital".
¿Qué debemos evitar en una emergencia
sanitaria?
Acabamos de estudiar los principios
básicos en la atención psicológica primaria. Sin embargo, también es
interesante que conozcas ciertas actuaciones o actitudes que no deberías
realizar
durante la atención en una emergencia
sanitaria, ya que pueden ser perjudiciales para el estado psicológico de las
víctimas:
·
No te pongas como ejemplo. Frases como "Se por lo que estás
pasando " o "Comprendo lo que sientes", no son del todo
correcto. En el ejemplo anterior Alberto comete este error. No se debe poner de
ejemplo ya que no es la misma situación. El chico del accidente esta presente
en el momento del fallecimiento de su abuelo y además, el conducía el coche, lo
que puede producir un sentimiento de culpabilidad. A parte de esto, Alberto
tampoco conoce la relación que ese chico tenía con su abuelo; imagina por un momento
que su abuelo era la persona que lo ha criado y además no tiene más familia;
obviamente el sentimiento de perdida que puede sufrir es mucho mayor que en
otra persona que no ha tenido tanta relación con su abuelo o que su familia es
mucho más extensa. Como normalmente careces de toda esta información, procura
no poner ejemplos, cada caso y cada persona es totalmente diferente a otra.
·
No enfatices los aspectos positivos de la situación. Frases como
"Podría haber sido peor" pueden ser contraproducentes.
·
Tampoco minimices el hecho con frases como "No pasa
nada". Hay que tomar la emergencia sanitaria tal y como es, sin exagerar
ni minimizar.
·
No bromees para quitar tensión a la escena, y menos en forma de
ironía.
·
Evita en todo momento este humor con los pacientes o con sus
familiares.
·
No dramatices ni te dejes llevar por los sentimientos de las
personas afectadas. Si una persona llora ya hemos visto que es bueno dejar que
lo haga, y si nos es posible, deberíamos proporcionarle un lugar un poco más
íntimo para que se desahogue; pero esto no quiere decir que nosotros debamos
llorar con ellos.
·
No debes engañar a las personas afectadas ni fingir.
·
No favorezcas que las personas afectadas se culpen. Esta actitud
en las víctimas es totalmente contraproducente para ellas.
·
No actúes a la defensiva. A veces las personas afectadas pueden
desplazar hacia ti su frustración, impotencia o ira, pero recuerda que no es
nada personal, simplemente es un mecanismo de defensa de la personalidad para
evitar el estrés psicológico. Muchas veces puede que te insulten o amenacen con
denunciarte por mala-praxis, pero debes evitar que esto te altere y no debes
entrar en la dinámica de intercambiar insultos o amenazas.
·
No favorezcas dependencias directas del afectado hacia ti. Si
llegas a una emergencia sanitaria en la que existe un gran volumen de personas
a la que atender, no puedes permanecer todo el tiempo con la misma víctima. De
ahí, que aunque le ofrezcas tu apoyo lo debes hacer de una forma en la que no
crees dependencia de la víctima hacia ti. Por ejemplo, puede usar frases del
tipo "Estamos aquí para ayudarte", siempre en plural para que la
víctima no focalice la ayuda sólo en ti (Fíjate en otras frases que he puesto
de ejemplo en la unidad didáctica y comprueba como todas ellas están en plural,
haciendo referencia a todo el equipo sanitario y no solamente a un auxiliador).
De aquí también parte de la importancia de potenciar la ayuda mutua entre las
víctimas.
La seguridad en la primera ayuda
psicológica
Algunas situaciones de emergencia,
debido a las características particulares que puedan tener estas o a la
personalidad de cada persona afectada, pueden generar conductas violentas que
involucran a diferentes personas, tanto a las víctimas, como a los auxiliadores
o a otras personas que puedan estar por la zona. A veces, se ha observado que
personas tranquilas y cooperativas pueden adoptar dichas conductas inapropiadas
o violentas.
Así, durante la intervención en estas
circunstancias, es necesario que adoptes ciertas medidas básicas de seguridad.
Aunque el en siguiente unidad de trabajo veremos algunas normas de seguridad
más específicas según la emergencia sanitaria a la que te enfrentes, aquí
enumeramos algunas que deberían ser aplicadas a todas las situaciones:
·
No permitas que la atención de una crisis sea una sorpresa para el
afectado, ya que el suceso de algo inesperado puede alterar al paciente. Así,
ya hemos comentado anteriormente que has de identificarte, explicar el motivo
de tu presencia y verbalizar todas las acciones que vayas a realizar.
·
Intenta prever posibles actos hostiles o agresiones. Evalúa
cuidadosamente no solo a la víctima de la emergencia sanitaria, sino también a
los familiares o amigos, ya que estos pueden estar muy alterados emocionalmente
o estar bajo los efectos de alguna droga (alcohol, cocaína,...).
·
Prevé vías de salida rápidas del lugar de trabajo por si fuera
necesario.
·
Debes tomar medidas de protección ante la presencia de animales o
mascotas potencialmente agresivas. Piensa que si su amo esta nervioso debido a
la situación a la que se enfrenta, el animal también lo estará (los animales
también se contagian de las emociones de las personas que hay a su alrededor);
Así, por ejemplo, aunque una persona a la que estas socorriendo asegure que su
perro es tranquilo e inofensivo, has de tomar las medidas preventivas
oportunas; Imagina que al movilizar a la víctima, que tiene varios huesos rotos
y este, grita por el dolor que le causan sus heridas; el perro verá esto como
una agresión a su dueño y puede que te ataque.
·
Siempre que te sea posible realiza tu intervención en pareja. Esta
es la regla básica de seguridad.
Ayuda psicológica en casos particulares
Hasta ahora hemos visto generalidades
sobre la intervención en una situación de emergencia, pero ya conoces que
existen ciertos grupos donde la tu actuación debe ser un poco más específica ya
sea debido a su limitación física, psicológica o ambas.
Así, por ejemplo, un niño, el cual su
personalidad no está totalmente conformada y tampoco sus mecanismos de defensa,
será más vulnerables al estrés producido por la emergencia
Personas agitadas
No hay que confundirlo con una conducta
agresiva, los agitados presentas hiperactividad, no paran de moverse y puede
desembocar en una tempestad de movimientos, como por ejemplo cuando alguien
bracea de modo grotesco y descontrolado. A parte, también puede tener alterada
la expresión verbal
hablando atropelladamente.
Nuestra intervención siempre será con
una actitud tranquila y empleando un tono de voz conciliador, tranquilo y con
un volumen inferior al empleado por él. Si tú levantas la voz para que te
escuche mejor él también lo hará, lo cual agrava su estado de nerviosismo.
También podemos darle alguna tarea
sencilla para que se sienta útil y dirija ese movimiento hacia algo en
concreto, como por ejemplo que nos ayude a transportar material.
Si la persona se encuentra ya en la
tempestad de movimientos, intentaremos reducirlo, pero de forma no violenta, ya
que no debemos interpretar este estado con un ataque hacia nuestra persona,
sino simplemente como la imposibilidad de controlar sus movimientos.
Personas desorientadas
La desorientación de las víctimas de
una emergencia sanitaria puede ser debida básicamente a dos causas:
·
A una enfermedad como el Alzheimer o cualquier otro tipo de
demencia.
·
A un traumatismo.
La desorientación que sufren puede ser
tanto espacial (no saben donde se encuentran) o temporal (por ejemplo no saben
que día de la semana es hoy). Independientemente del tipo de desorientación que
sufran, lo importante aquí es conocer si es debido a un traumatismo, lo que
requerirá la asistencia médica oportuna.
En tu actuación de primera ayuda
psicológica, deberás:
·
Procura tener cierto contacto físico con dichas personas (por
ejemplo puedes cogerles las manos al hablar), ya que esto le dará gran
seguridad
·
Intenta reorientarles. Para ello lo mejor es que utilices
referencias permanentes, como puede ser la iglesia, el colegio,...
Personas con conductas agresivas
Cuando llegamos a una emergencia en el
que existe un individuo agresivo, lo primero que hay que hacer es
tranquilizarse a uno mismo, ya que como hemos visto el nerviosismo y el miedo
se transmiten de una persona a otra y esto es justamente lo que menos falta nos
hace.
Además, también evitaremos ciertas
actitudes por nuestra parte que pueden desencadenar respuestas agresivas; estas
actitudes serían:
·
Apatía y frialdad en el trato.
·
Tratarlo con menosprecio o condescendencia.
·
Impaciencia, en cualquier situación de emergencia, hay que pensar
que el tiempo corre a nuestro favor. En este caso, la tensión que provoca la
agresividad puede llevar al agotamiento del sujeto, lo que lo hace entrar en
una pauta más razonable.
·
Evitaremos emplear amenazas, coacciones o insultos en nuestro
trato. Aunque el nos insulte no hay que seguirle el juego y tomarlo como algo
personal, ya que no lo es, sino que van dirigidos a instituciones,
circunstancias o el mismo destino.
·
Tampoco recriminaremos en ningún momento su actitud, ni siquiera
después de que se haya tranquilizado, ya que se puede volver al estado de
violencia inicial.
·
Tenemos que evitar posturas o gestos que puedan transmitir amenaza
al sujeto.
·
Muchas veces uno de estos nos indica poco, pero la suma de todos
si que puede parecer hostil:
1.
Permanecer de pie y en posición frontal.
2.
Colocarse a una altura superior a la suya; Si el esta sentado,
nosotros nos podemos agachar para mirarlo a su misma altura.
3.
Colocar los brazos en jarra, o cruzarlos sobre el pecho.
4.
Señalar con el dedo de manera acusadora.
5.
Mantener un contacto ocular prolongado.
6.
Los movimientos rápidos o dar la espalda con desaire.
A parte de tener en cuenta todos estos
aspectos a la hora de tratar con alguien violento, también es importante
mantener una serie de medidas de seguridad, las cuales no nos deberíamos saltar
en ninguna ocasión. Aunque ya has estudiado algunas de estás, aquí las amplío
para situaciones más peligrosas como puede ser esta:
·
Disponer siempre de una vía accesible, rápida y segura para poder
escapar en caso de intento de agresión. Así, por ejemplo, si nos encontramos a
solas con el agresor, es recomendable no cerrar la puerta del todo, para poder
huir más rápidamente o para que tus compañeros te ayuden a reducirlo en caso
necesario.
·
No llegar nunca al lugar donde se encuentra el agresor por la
espalda, ya que lo podría interpretar como una amenaza.
·
Dejar una distancia de seguridad con el agresor, mínima de un
brazo de distancia.
·
No dar jamás la espalda al agresor, ya que nos quedaremos
indefensos y ofrecemos mayor superficie de ataque. La mejor posición es
ligeramente de lado, ya que ofrecemos menos superficie de ataque y en caso de
tener que darnos a la fuga, nuestro tiempo de reacción será menor.
·
Evitar en la medida de lo posible la presencia de otras personas o
medios de comunicación, ya que muchas veces por orgullo puede que nos cueste
más que deponga esa actitud agresiva.
·
Si va armado, avisar inmediatamente a la policía y dejar el asunto
en sus manos. Yo recomiendo no intervenir en absoluto a no ser que sea
totalmente imprescindible o que exista una relación de confianza previa. En tal
caso, no debemos coger nunca el arma con las manos, ni de las manos del otro.
Solicitaremos al agresor que la deposite sobre el suelo, puesto que un cambio
repentino de idea puede provocar un peligroso forcejeo.
Intentos autolíticos
Antes de explicar como podríamos actuar
en una situación como esta hay que hacer dos reflexiones: Una, tú, como técnico
en situaciones de emergencias, seguramente veas personas que han fallecido,
pero ¿Estás preparado para ver cómo alguien se quita la vida delante de
ti?; y la otra reflexión que has de hacer es, "no eres omnipotente",
tu intentarás todo lo posible para salvaguardar la integridad física del
suicida, pero quién toma la decisión final es él, con lo que tú, jamás serás
responsable ni culpable de sus actos.
También es importante aclarar otro
punto, seguramente habrás oído que el que quiere suicidarse lo hace sin más, y
que el que llama a la policía o a los bomberos, es que realmente no quiere
quitarse la vida y por tanto nunca lo hace. Esto no es del todo verdad, ya que
aunque la mayoría de las veces si que es así, puede que se dañe a sí mismo, o
que simplemente debido al estado alterado del suicida este pueda resbalar provocando
una caída de altura fatal. Así pues, siempre tendrás que actuar con el máximo
rigor posible y tomar al suicida en serio.
Vamos a exponer ciertos aspectos
generales en la actuación ante una llamada en la que se amenace con un intento
autolítico, aunque hay que tener siempre en cuenta, que cada situación es
particular y estas normas pueden ser rotas en cierto momento si se cree
oportuno:
·
En primer lugar, si eres el operador que recibe la llamada, aparte
de dar el aviso, has de procurar mantenerlo al teléfono todo el tiempo que
te sea posible hasta que lleguen tus compañeros al lugar de los hechos,
esto impedirá que el sujeto piense en exceso en los problemas de forma negativa
(ya que tú le harás ver la parte positiva) y ejecute la amenaza antes de que
lleguen los servicios sanitarios.
·
Al llegar al lugar quitaremos la sirena y las luces de la
ambulancia para evitar asustar al suicida.
·
Antes de hablar con el suicida es conveniente obtener toda la
información sobre este que podamos conseguir a través de familiares,
vecinos,...
·
Habrá un único interlocutor, con lo que si ya existe cuando
llegues al lugar de la emergencia, deja que siga trabajando él y quédate
de apoyo por si necesita tu ayuda. También puedes asistir a los familiares que
viven muy dolorosamente estas situaciones, haciéndoles entender que está
enfermo y necesita ayuda.
·
Como con cualquier víctima de cualquier suceso nos presentaremos y pediremos
su nombre. Puede que se niegue a hablar con nosotros, en cuyo caso
hablaremos nosotros sobre temas neutros, no ataquéis nunca el problema directamente,
si él no quiere tratar el tema habrá que introducirlo lenta y tangencialmente.
·
Nunca juzgaremos a la víctima ni efectuaremos reproches.
·
Puedes intentar negociar, como por ejemplo: "Echo a todo el
mundo de la azotea y yo me siento al lado de la puerta si tu te bajas de
la baranda". Date cuenta que siempre tendrás que acabar cediendo tu a
sus peticiones y por tanto no suele ser efectiva la negociación, pero aun
así no está de más intentarlo.
·
Puede que solicite ver a algún familiar, en cuyo caso aceptaremos, excepto
en los caos en que sospechemos de abusos o maltratos, ya no solo para
evitar el posible maltrato físico, sino también el psíquico.
·
Pueden darse casos en que intenten castigar a la víctima
quitándose la vida delante de ella/él, con el fin de hacerla sentir
culpable.
·
Si consigues que cambie de opinión, no debes abandonar al paciente
hasta su ingreso hospitalario, ya que si ha cambiado una vez de opinión
puede volver a hacerlo, con lo que hay que tenerlo totalmente
controlado.
Suicidas: Personas que amenazan con quitarse la vida
Vamos a analizar ahora más detenidamente las dos llamadas más típicas que se pueden recibir de un intento autolítico, que son, o que alguien está subido en algún lugar de altura y que amenaza con precipitarse al vació, o la llamada de alguien que está en casa y que amenaza con quitarse la vida de una forma u otra:
- Interior de la vivienda. Lo primero que hay
que decir en este punto es que nuestra seguridad siempre es lo más importante
en toda asistencia que vayamos a realizar, con lo cual vamos a actuar con la
máxima prudencia posible, ya que no sabemos las condiciones del interior de la
vivienda, si el paciente está armado,...
·
Lo primero que haremos es intentar entablar una conversación
con la persona que esté en el interior. Así, podremos hacernos una idea de
su estado, si está nervioso, si está bajo el influjo de alguna droga,...
·
Siempre debemos comunicar a nuestro interlocutor nuestras
intenciones de acceder a la habitación y hacerlo lentamente para no
asustarlo. En caso de que se niegue a nuestro acceso, no debemos pasar, ya que
puede tomar represalias contra el mismo o contra nosotros.
·
También hay que tener excesivo cuidado con los intentos de
suicidio por explosión de gas, ya que a parte del riesgo físico que tiene,
en la atención sanitaria de estos sujetos hay que extremar las protecciones
(guantes, pantallas, mascarillas,...), ya que se encuentran en carne viva
y puede que tengan algún tipo de enfermedad como SIDA.
·
Una de las formas más comunes de quitarse la vida en el interior
de la vivienda sería la ingesta masiva de medicamentos. Ante esta
situación, en primer lugar has de realizar la atención sanitaria oportuna. Lo
más normal, cuando llegues al lugar del incidente es que la víctima este
inconsciente o semi-inconsciente, con lo cual tu atención psicológica irá
enfocada a los familiares o amigos que se encuentren en la zona. Esta
atención a familiares la veremos en la siguiente unidad, pero aquí te
indico lo principal: A parte de los principios básicos en la atención
psicológica, debes intentar hacerles ver que esta conducta es algo
personal de la víctima y que no tiene nada que ver con ellos y que no podrían
haberlo evitado.
En caso de que el
individuo se encuentre consciente, a parte de tu actuación con los principios
básicos que ya hemos visto, y siempre con una escucha activa, tu atención
psicológica será mínima, ya que su problema excede tu formación en este ámbito
y has de recomendarle la visita a un psicólogo.
Ahora vamos a ver otra forma de
autolisis, hasta ahora hemos visto las características generales y losintentos
autolíticos en el interior de la vivienda; Ahora vamos veremos las amenazas por
precipitación, que aunque son menos numerosas son muy vistosas y llamativas
para todas las personas que se encuentren por la zona. Cuando llegue al lugar
donde se está produciendo esta emergencia, a parte de seguir las indicaciones
generales, debes:
·
Seguramente no seremos los primeros en llegar, y con el suicida
habrá más gente, curiosos, familiares,... con lo cual debemos hacer que se
fije en nosotros llamando su atención. Por ejemplo, puedes entrar con los
brazos en alto, ya que esto llamará su atención y además le estás
demostrando que no eres una amenaza para él.
·
Debemos tranquilizarle respecto a nuestras intenciones, con lo cual
nos identificaremos como personal sanitario y le demostraremos de una forma
evidente que no queremos cogerle, para ello nos podemos sentar a una
distancia de seguridad que nos suele marcar él.
·
En muchas películas y series hemos visto que en cuanto la víctima
se despista se le agarra, se le reduce y se acabó el problema; pero esto
no es así en la vida real y debemos evitar intentar agarrarlo o cualquier
movimiento brusco, puesto que esto asustará al paciente y puede que
hagamos que se precipite en su decisión. Además, por muy fuerte que estés, levantar
el peso de una persona mientras que esta se retuerce en el vacío es muy
complicado. También corres el riesgo que cogerlo por la ropa, la cual que
puede romper, desabrocharse,...
·
Así, también le tienes que hacer ver este último punto al suicida,
ya que puede que se precipite pensando que tú vas a ser lo bastante rápido
y fuerte como para evitarlo.
·
Cuando el suicida desiste de su actitud (y sobre todo si este
cambio ha sido muy repentino), nos encontramos en el momento de mayor
riesgo a causa del llamado impulso suicida. No debemos darle tiempo de que se
replantee la situación, para la cual emplearemos la estrategia de abrazo
instrumental:
1.
Primero le abrazaremos emotivamente y haremos un comentario del
tipo: "que alegría que hayas cambiado idea".
2.
Tras esto, le pasaremos un brazo por los hombros y de este modo le
acompañaremos a la ambulancia.
Con esta actuación conseguimos un
contacto muy íntimo con el suicida y podremos agarrarle al menor intento de
zafarse. Además, lo realizamos de tal manera que el suicida no se percate de
nuestras verdaderas intenciones y que pueda asustarse.
Intervenciones con personas afectadas
por trastornos mentales
Puede darse la circunstancia, en la que
en una intervención sanitaria te encuentres con una víctima con algún tipo de
trastorno mental como depresiones, esquizofrenia, trastorno bipolar,... Por
supuesto,
en tales casos, no es tu función, como
técnico de emergencias sanitarias, efectuar un diagnóstico psicológico, ya que
esto lo ha de realizar un psicólogo, el cual toma su tiempo y suele emplear
instrumentos objetivos de medida, y
además, su diagnóstico puede variar a lo largo de las diversas sesiones de
evaluación. Así, tu función será simplemente la de actuar respondiendo a la
conducta
observada.
·
Lo ideal sería conocer el posible trastorno que sufre la víctima,
ya que así, aunque su comportamiento no nos dé ninguna pista sobre esta,
nosotros al conocer el trastorno, podemos actuar con las precauciones según
cada caso. Pero, ¿cómo averiguar si sufre algún trastorno?. Podemos
preguntar a algún familiar, pero es probable que la respuesta de estos
siempre sea "Tiene depresión". Emplean este término de modo
genérico, ya que socialmente este no está tan estigmatizado como puede
ocurrir con otras enfermedades como la esquizofrenia.
·
Así, es mucho más útil averiguar la medicación que está tomando
el sujeto.
Veamos ahora algunos
de estos trastornos mentales y algunas pautas de actuación genéricas.
Personas depresivas.
Aquí, vamos a incluir no sólo a aquella
personas que estén diagnosticadas de este trastorno, sino también nos referiremos
a las personas que manifiestan una gran tristeza.
Para comprender mejor a las personas
con este tipo de trastorno, piensa que el sentimiento que mejor describe a un
depresivo podría ser la desesperanza, es decir, la persona percibe que para
ella no
existe la menor esperanza. De hecho, la
mayor parte de las veces, tu intervención con este tipo de personas estará
vinculada a algún intento autolítico (tratado ya anteriormente). A grandes
rasgos
nuestra actuación se
basará en:
·
Ya hemos dicho que con un depresivo existe gran riesgo de que
se produzcan conductas autolíticas. Por lo tanto, si es conveniente para
la situación que se nos plantee en laemergencia sanitaria, podemos preguntar
sobre ello sin elmenor temor, ya que no le estaremos dando ninguna idea que no
se le haya pasado ya por la cabeza, y, el hablarabiertamente sobre el tema,
puede causarle cierto alivio.
·
El dolor que sufre un depresivo es profundo y persistente, con lo
que no intentes contagiarles tu entusiasmo, ya que esto no funcionará. En
ocasiones su dolor puede ser tan grande que ni siquiera son reactivos a la
emergencia que se les presenta a su alrededor.
·
Trátales comprensiva y afectuosamente, pero sin llegar al mimo.
·
No debes darle demasiadas ordenes, solamente aquellas
imprescindibles. Y a poder ser, realiza esta actuación en forma de
petición y no de imposición, es decir, no digas "Vente conmigo a la
ambulancia que tengo que vendarte la mano" sino, "Si no te
importa, acompáñame a la ambulancia y veamos como podemos curar esa herida de
la mano", como ves, no le impones que se dirija hacia donde tu
quieres, pero seguramente lo lograrás sin que ello pueda incomodar a la
víctima.
Personas esquizofrénicas.
Para el nivel que estamos tratando
nosotros en este módulo, diremos que un esquizofrénico es aquella persona que
presenta delirios y alucinaciones. Frecuentemente puede ir acompañada de
paranoia.
Pero, ¿que entiendes por delirios,
alucinaciones o paranoia?
Las alucinaciones son falsas
percepciones del individuo, es decir, puede ver, oír, oler, saborear o sentir
cosas que no existen; pero sin embargo, él las percibe como reales y por tanto
le dará un valor como tal.
Los delirios serían las
interpretaciones que el individuo hace de estas alucinaciones, es decir, como
un argumento que une todas estas con la realidad y que les intenta dar sentido.
Al escuchar los delirios de alguien puede que al principio parezca razonable y
normal, pero al cabo de un rato comprobarás que la historia que cuenta no tiene
demasiado sentido.
Estos delirios pueden ser muy variados
y pueden representar una amenaza tanto para ti, como para sí mismos y poder
llegar a autolesionarse.
La paranoia que se manifiesta en estos
casos sería una desconfianza enfermiza y una suspicacia exagerada.
Esta paranoia no tiene por qué acabar
en un episodio violento como creen muchas personas. Un esquizofrénico no es ni
más ni menos violento que cualquier otra persona, lo que sucede es que tú desconoces
que papel desempeñas en las alucinaciones que sufre esta persona. Así, si es un
papel amenazante, puede que si se dé un comportamiento agresivo.
Como ya hemos dicho que tú desconoces
el papel que puedes desempeñar en sus delirios, y que este puede ser un papel
amenazante (aunque no siempre), has de actuar siempre con una gran precaución:
·
Reúne toda la información que te sea posible sobre la persona a la
que vas a atender. Procura averiguar si toma alguna medicación, ya que
como hemos explicado los familiares normalmente no te dicen abiertamente el
trastorno que sufre.
·
Acércate a el frontalmente, dentro de su campo visual, ya que si
lo sorprendes, puede tomar esto como una amenaza.
·
Procura tener una actitud comprensiva y tratarlo con tono suave.
·
Al necesitar medicación más específica de la que puedes disponer
para compensar su desequilibrio, tu objetivo final será el ingreso
psiquiátrico.
·
Aunque una vez ingresado en el psiquiátrico o en un hospital (donde
se cuentan con otros medios) no es recomendable participar o dar crédito
al delirio, este puede ser aprovechado en situaciones de emergencia para
conseguir tu objetivo. Un claro ejemplo es el que podemos encontrar en el
libro "asistencia psicológica a víctimas" del sargento de bomberos
Ferran Lorente Gironella.
"Un vecino informó a la central de una explosión en el piso superior... Allí coincidimos bombero, policías,ambulancias... Cuando llegamos a la puerta del piso, esta permanecía cerrada y nadie contestaba a los golpes que dimos a la puerta. Ni desde el interior ni desde el exterior del edificio se apreciaba rastro de deflagración alguna, el explosímetro indicaba que no había ni la más mínima concentración de gas. Decidimos llamar al vecino que había dado la alarma, nos recibió un señor de mediana edad muy amable, que vivía solo.
Efectivamente él había dado la alarma, sus vecinos de arriba eran groseros y ruidosos pero él lo soportabaestoicamente ya que era un buen cristiano. El problema era por la noche cuando se combaban y petaban parareproducirse, produciendo explosiones que luego eran reabsorbidas en otro plano por el universo. Esta noche laexplosión había sido mucho mayor, hasta tal punto que llegó a dudar de que el universo tuviera suficientecapacidad de reabsorción. Fue entonces cuando llamó porque "sabía" que los bomberos disponíamos de materiasecreto de procedencia alienígena capaz de resolver estos lances.
Discretamente le
informamos que para emplear este tipo de material precisábamos de una denuncia
que solo élpodía presentar en el hospital provincial, y que los de la
ambulancia estaban en el secreto, eran muy amables y letrasladarían de modo
inmediato"
Personas Maníaticas
Al hablar de personas maníacas nos
referimos tanto a las que sufren un trastorno maníaco como a las que sufren un
trastorno bipolar (antes llamado trastorno maníacodepresivo) en la fase
maníaca. El comportamiento y la actitud de estas personas será el de alguien
que todo lo sabe y todo lo puede, con lo cual se sentirá eufórico, hablará por
los codos saltando de un tema a otro y sin terminar nada de lo iniciado. Se ve
capaz de cualquier cosa y por tanto quedarse quieto y aparte de todo lo que se
desarrolla a su alrededor es prácticamente imposible para él.
En algunas ocasiones y debido a la gran
euforia que sufren, pueden presentar delirios.
En estos casos debes actuar como hemos
descrito en el punto sobre personas esquizofrénicas.
A la hora de realizar una intervención
en una situación de emergencia en la que encontremos algún maníaco, deberíamos
tener en cuenta:
·
Los maníacos son muy impulsivos, con lo que sus actos pueden ser
totalmente inesperados y sorprenderte, así pues, deberás extremar tu
seguridad, sobre todo si la intervención se realiza en un sitio de riesgo, como
puede ser un sitio con tráfico, alturas, zonas industriales,...
·
Es muy raro que se muestren agresivos, pero si este es el caso
espera a que llegue la policía para que lo reduzcan ellos. Si por las
características de la situación tuvieras que realizar tú esta actuación,
realízala siempre con la ayuda de otro compañero y no olvides que es un
enfermo y que debes tratarlo como tal.
·
Con estas personas, pese a lo que pueda parecer, es complicado
mantener una conversación, ya que su atención es muy dispersa y ellos
"siempre" están en posesión de la verdad. A la hora de comunicarte
con ellos deberás ser muy repetitivo y perseverante hasta que consigas tu
objetivo.
·
Sin embargo, evita contradecirles ya que presentan baja tolerancia
la frustración, y esto puede irritarles fácilmente. Procura que ante una
negociación piensen que son ellos los que salen ganando.
Personas con crisis histriónicas.
Son comúnmente conocidas como ataques
de histeria. Las personas que lo sufren son gente que demandan la atención del
resto de observadores de un modo espectacular, y así, transmiten de algún modo
esta necesidad y su estado de ánimo al grupo. Estas crisis suelen ser muy
teatrales y parece que estén representando un drama ante un público de
transeúntes que les observan. Sin embargo, cuando observes a alguien con una
crisis histriónica comprobarás que parece que sobre actúen, ya que son
personas muy emocionales y pueden pasar
del llanto a la carcajada en un momento.
Son situaciones que te pueden provocar
mucha ansiedad, ya que son muy escandalosas y parecen imposibles de manejar. En
gran medida puede deberse a que la víctima suele intentar manipular a las
personas para que actúen según la obra que está "interpretando". Si
esa persona que está a su lado te intentará manejar a ti y puede que te
convenza para realizar algo que no debes hacer, como por ejemplo, cambiar el
orden de preferencia de atención sanitaria en una emergencia.
Entonces, ¿Cómo cual
ha de ser tu actitud y tu actuación en una situación con alguna víctima con una
crisis histriónica?
·
En primer lugar, no debes permitir en ningún caso esa manipulación de
la que hemos hablado.
·
Intenta reconducir la situación utilizando las diferentes
estrategias de comunicación que ya has estudiado.
·
Respeta a la víctima en todo momento. Recuerda que está sufriendo
una crisis y su comportamiento se debe a esta.
·
Puede que encuentres en guías o libros que hablen de esta crisis
recomendaciones para atajar estas crisis, una de estas sugerencias suele
ser la de dar un par de bofetadas. Esta actuación realmente sólo calma tu
ansiedad y suponen un grave atentado contra la auto-estima de la persona
agredida, con lo cuál, evita aplicarla.
·
Procura mantener la calma y no te alarmes por su teatralidad.
Recuerda que es parte de la crisis que está sufriendo.
·
Actúa sin prisas. Si esta interpretando un drama, piensa que toda
obra tiene su final y este llegará tarde o temprano. No te precipites en
tu actuación.
·
Durante la conversación con un histriónico, focaliza esta hacia
ellos mismos, ya que suelen ser el personaje central de su "obra".
Así, tampoco intentes ser tú el personaje central, ya que al hacer esto, la
comunicación con la víctima se puede ver afectada y no quiera escucharte.
·
Has de ser prudente a la hora de establecer contacto con los
histriónicos. Así, si es de distinto género, siempre pedirás permiso para
establecer dicho contacto.
·
Las personas histriónicas son muy emocionales e impulsivas, con lo
que debes mantener las condiciones de seguridad y ser prudente. Imagina
que esta persona va armada y anteriormente ha intentado lesionarse el mismo.
Personas con crisis de ansiedad
Ya has estudiado que esta crisis de
ansiedad puede deberse a una situación estresante, lo cual casi por definición
lo podemos extrapolar a una situación de emergencia. Ante esta, la persona
puede tener síntomas muy variados con sudoración, temblores, sensación de
ahogo, opresión torácica, sofocos, sensación de entumecimiento en alguna
extremidad,... Así, encontrarás a esta persona muy asustada, con
miedo a morir o que le ocurra algo muy grave.
Durante tu actuación procura:
·
Hacerle ver a la persona que estos ataques son algo normal y que
casi todo el mundo pasa por una de estas crisis en su vida.
·
Explicarle que es inútil luchar contra ella, que simplemente a de
dejar pasarla y que nadie se muere de una crisis de ansiedad.
·
Hacerle respirar en una bolsa cerrada. Ante la situación
estresante, la víctima comenzará a respirar de un modo ansioso (con
respiraciones cortas y muy frecuentes). Esta hiperventilación provoca un
descenso de la presión parcial de CO2, lo que altera el equilibrio
ácido/base produciendo una alcalosis respiratoria, esta alcalosis producirá una
constricción de las arterias que van al cerebro, lo que genera mareos, así, también provocará
una taquicardia. Estas taquicardias suelen provocar un aumento del miedo en la
persona, ya que pueden pensar que están sufriendo un ataque al corazón. Es
respirar en una bolsa cerrada, la cual cada vez será más pobre en O2 y mas rica
en CO2, restablecerá el equilibrio eliminando sus efectos y tranquilizando
en parte a la persona afectada.
Consumo de sustancias
Al hablar en este punto sobre drogas,
diremos que existen gran cantidad de ellas, tanto legales, como puede ser el
alcohol, como ilegales. Hacer un estudio detallado de ello nos llevaría gran
cantidad de tiempo en conocer la gran variedad de drogas existentes, así como
su efecto o consecuencia de su uso a largo o corto plazo.
A título general, diremos que existen
tres grandes grupos para clasificar dichas drogas:
1.
Estimuladoras del sistema nervioso central. En este grupo se
encontrarían las anfetaminas y sus derivados (llamadas drogas de diseño), la
cocaína o el alcohol a bajas dosis. Provocan una mayor resistencia física
transitoria gracias a la activación del sistema nervioso central, producen
euforia, aumenta el estado de alerta y la actividad motriz. Disminuye la
fatiga, el apetito y mejora el rendimiento intelectual.
2.
Depresoras del sistema nervioso central. Aquí incluiríamos los
opiáceos y derivados, el alcohol a grandes dosis y los barbitúricos. Actúan
inhibiendo los mecanismos cerebrales que sirven para mantener el estado de
vigilia del organismo.
3.
Alucinógenos. Estas drogas provocan alteraciones psíquicas que
afectan a la percepción. Producen una distorsión en la percepción de visiones,
audiciones y la generación de sensaciones irreales, o sea, crean alucinaciones.
Sin embargo, aunque en principio puede parecer que es parecido a lo comentado
en el punto de esquizofrenia, es totalmente diferente, ya que aquí el sujeto
conserva la noción de realidad y conoce perfectamente que está viviendo una
alucinación. Esto no quiere decir que aunque sepan que son alucinaciones,
debido a su estado alterado, actúen de acuerdo al delirio que haya conformado
su mentes.
Tu primera actuación ante la presencia
en una emergencia de una persona que ha consumido drogas, es intentar averiguar
cual de ellas es y prestar tu atención sanitaria según el caso correspondiente.
Sin
embargo, si que existen ciertas
actitudes que es bueno que adoptes para esta atención:
·
Si la víctima está bajo los efectos de sustancias depresoras es
convenientes mantenerlos activos.
·
Si la víctima ha consumido sustancias estimulantes del sistema
nervioso, procura hablarles en tono tranquilo y sereno e intenta apartarlo
de personas que también presenten este comportamientos, ya que al permanecer
juntos, esta euforia se puede contagiar y provocar un efecto mayor que el
que provocarían estas personas por separado. Es conveniente quetampoco intentes
establecer contacto físico, ya que no suelen aceptarlo bien.
·
Si el sujeto esta bajo los efectos de sustancias alucinógenas
procura tratarlos de forma afectiva y que no tengan sensación de
inseguridad. También has de tratar que no se lesionen o se hagan daño debido a
sus actuaciones por las alucinaciones que sufren.